¿Cuanto gastara el gobierno de CFK en lámparas de bajo consumo? ¿Cuanto en folletería sobre el uso racional del la energía? ¿Cuanto en publicidad televisiva? ¿No era mejor trabajar? ¿Cuanto hace que estamos en esta situación y se continúa sin hacer nada? ¿Cuánto de imprevisión hay en la situación que se repite año a año? ¿Deberán obligar a las empresas de electrodomésticos a no vender más aire acondicionado? ¿Deberán los argentinos resignarse al calor y por lo tanto no poder disfrutar del un día menos caluroso? ¿La familia K, en invierno, racionara el uso del gas natural en su casa de Río Gallegos? ¿En el verano los funcionarios K pondrán los termostatos de sus AC en 24°c? ¿CFK usara menos el tango 01 para evitar el gasto de combustibles cuando el petróleo paso la mítica barrera de los u$s100? ¿Oscureceremos todo el centro porteño, bajando la intensidad de las marquesinas, de la iluminación de los monumentos y de las plazas, para realmente lograr casi nada de ahorro? ¿Continuara el gobierno sin invertir en lo que realmente importa? ¿Deberemos los argentinos vivir cortes de luz y por ende de agua como en tiempos pasados? ¿Esto sucede por primera vez o seguimos con el hábito del avestruz, de esconder la cabeza para no ver los problemas? ¿Habrá el gobierno recordado el problema cuando volvió a hacer calor un día de noviembre? ¿Sera finalmente tomada en cuenta la energía limpia como alternativa? ¿Volveremos a comprar fueloil a Venezuela para contaminar toda la zona de polo petroquímico quemándolo, para generar energía a menor costo? ¿Finalmente el gobierno Argentino tomara la decisión estratégica de invertir en energía, de planificar una política energética inteligente, de obligar a las empresas al mantenimiento correcto de las redes de transporte, de tomar conciencia que es mas importante la inversión en tecnología e investigación que en obra publica populista? Quizás esta sea la única respuesta que creemos conocer: Lo dudamos muchísimo.
Humo del Bueno
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